Podría habetr sido peor... Casi siempre puede ser peor; pero eso no endulza el lamentable resultado de los comicios electorales ayer celebrados.
Cierto que una victoria de la derecha hubiese sido muna debacle mayor; pero este desmesurado crecimiento del bipartidismo es lo peor que podría ocurrirle a la política de este país. En doce años, cuatro convocatorias a cortes generales -ya hemos olvidado, parece, que no celebramos presidenciales-, hemos disminuido de 53 a 27 los escaños ocupados en la Cámara Baja por representantes no de los dos partidos mayoritarios. Hemos pasado de un 15% a un 7,7%. ¿Alguien duda que quieren volver "a las dos Españas"? Ya sí somos como el resto del muyndo "occidentalizado"; sólo dos opciones: desde el centroizquierda -cuando quieren ponerse sociales- hasta la derecha pura y dura -para que no olvidemos que manda el capital (la empresa privada)-.
Hay que felicitar al PSOE -escribir el significado de sus siglas (casi) me avergüenza- por haber logrado convencer a tantísima gente de la "necesidad del voto útil". Su mayor y mejor arma electoral ha sido el miedo a la derecha. Pese a la gran mentira del voto útil, la derecha rancia también ha crecido en votos y escaños.
Pese a todo lo ocurrido con Zapatero, Catalunya se ha volcado con el PSC. Récord histórico -el único partido que ha aumentado votos-. Aquí sí, eterno feudo socialista, el miedo a la derecha más rancia y españolista les ha dado sus mejores frutos. Pese a todo, los populares mejroan en escaños, aunque siguen sin lograr ninguno por Girona; pero han sido segunda fuerza en alguna localidad del cinturón barcelonés. ERC ha pagado muy caro sus errores (y los de otros) y ha regresado a la senda más ortodrómica. Sabia decisión la de adelantar el congreso del partido a junio; ahora falta ver qué se decide en él; pero parece obvia que los cambios son necesarios -y no sé si se están empezando en la buena senda-. CiU ha pescado un escaño más en su navegar entre dos aguas, en su dobles juegos y en su dejarse querer mientras tratan de hacer ver que están más cerca de odiar. Lo de ICV-EUA era de esperar con tanta "estúpida utilidad"; pese a que la debacle grave (todavía mayor debido al sistema electoral) es la de la IU. ¿Hay quien todavía cfirma que éste es un país de izquierdas? La derrota tomada en los últimos años de navegación no ha sido nada afortunada; es necesaria una nueva refundación, el estado lo necesita.
Son sintomáticos también los resultados en Euskal Herria. Por su parte, una de las pocas alegrías de la noche: la previvencia de uno de los más lúcidos cerebros que ha entrado en el Congreso, Uxúe Barkos desde Na-Bai. Por otro lado, triste la desaparición de EA (ni soñar, visto lo visto, con que pudiese aparecer Aralar). Y la "utilidad" ha dado un vuelco y los entre ocho y diez mil votos que separaban a EAJ-PNV y PSE ahora lo son en sentido contrario. Es sorprendente lo logrado por UPyD al conseguir un escaño por Madrid. Quizá sea el principio para soñar, dentro de unos años, con robarle espacio al PP.
Más allá de la desaparición de las ideosincracias plurales; vemos como Catalunya y Andalucía, y Euskadi, son los feudos socialistas y Madrid y País Valencià (donde siguen aumentando) populares.
¿Y ahora? El PP puede dedicarse a más de lo mismo, o a sus propias luchas intestinas. ¿Debe o no debe Rajoy seguir al mando? Probablemente trate de "limpiar" algo de su "cúpula prorrogada" -Zaplana no será más portavoz- y ver como evoluciona la política estatal para organizar el congreso del partido en aproximadamente un año.
Mientras tanto, los vencedores (por suerte no la derecha, y el centroizquierda sin mayoría absoluta) tienen mayoría suficiente para gobernar "en minoría" (sin pacots estables, y buscando acuerdos puntuales para aprobar leyes). Además, sus grandes aliadaos en la última legislatura no le permiten sumar los 176 escaños necesarios. Podría buscar una suma con los nacionalista moderados vascos y canarios -como en situaciones precedentes-; pero la situación de EAJ-PNV, con el prebiscito soberanista planteado por la lehendakaritza para otoño no facilita el entendimiento. Y vistos los resultados catalanes, sería una ofensa y una afrenta para su electorado aceptar los eternos cantos de sirena de CiU -los que no aceptarían ser decisivos en Madrid y no en Barcelona-. Aunque no sería la primera vez que Zapatero olvida que fue gracias al gran apoyo de Maragall y del PSC que llegó a la secretaría feneral del partido. Esperemos que el PSC refuerze su posción en Ferraz y "obligue" a un mayor federalismo (puede ser su mejor opción para tratar de forzar recuperar grupo parlamentario propio, como la Entesa en el Senado -soñar con su reforma sigue siendo una quimera, más que una promesa electoral-).
Pese a lo que parece, puede no ser una legislatura fácil para el gobierno socialista de Rodríguez Zapatero -puede ser ese el gran motivo de felicidad, o no tristeza, en la sede de la calle Génova-. Cuestiones territoriales abiertas, el eterno problema del terrorismo (el PP seguirá haciendo bandera con ello seguro, como con las politicas de la inmigración), "el català emprenyat" le ha dado la confianza para que solucione sus problemas, la recesión económica galopante que se avecina...
Y por último, como hablar del Senado es casi una pérdida de tiempo mientras no decidan ser políticos de estado y reformarlo, un comentario sobre las autonómicas andaluzas. Chávez se mantiene en San Telmo -manteniendo la absoluta casi por los pelos-; pero el PP ha ganado diez escaños: los cinco que "sobraban" al PSOE-A (toca renovarse, quizá ya sea hora de buscar la sustituta) y los cinco que pierden (lástima de luchas internas y de candidato poco conocido) Coalición Andalucista. Será la primera vez que los herederos de Rojas-Marcos no estarán en el Parlamento Andaluz.
+ info: elecciones página ministerio
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